Si el canon minero esta orientado básicamente para desarrollar proyectos de infraestructura, de inversión productiva, de salud, de educación y saneamiento básico y ahora con cierta inversión para seguridad ciudadana; ¿Por qué se esta promoviendo el uso de este dinero que pertenece a todos los ancashinos en el reflotamiento de un helicóptero usado a un costo aproximado de 3.5 millones de soles? Esto es una muestra indignante de despilfarro de los recursos del canon.
Despilfarro es un término que se usa para identificar el gasto suntuoso o al uso de mucho dinero en una compra que no soluciona los problemas de forma prioritaria. En este contexto decir que se mejorará la seguridad ciudadana comprando un helicóptero es una afirmación del despilfarro.
Podrá decirse que un helicóptero para 12 personas servirá para rescatar a individuos atrapados en el mar, en el territorio agreste de la sierra ancashina que incluye lugares lejanos, ser usado para el rescate de uno que otro montanista perdido en la cordillera blanca, etc. Pero me pregunto, si con esta acción ¿Se contribuirá prioritariamente para resguardar la seguridad ciudadana en el ámbito no delincuencial? Creo que no.
Un helicóptero necesita un mantenimiento sumamente costoso, personal idóneo, rescatistas entrenados, helipuertos descentralizados en el territorio ancashino que no hay, o es que dicho aparato volador aterrizara en las pistas, plaza de armas, techos policiales u otro lugar inapropiado; que locura.
Si bien es cierto alguien de la sociedad civil lanzó esta iniciativa con la mejor de las intenciones, en su afán de contribuir con una opinión respetable por cierto, para contribuir con un avance en seguridad ciudadana, no es razón para que el GRA tome a ojos ciegos esta propuesta sin un detenido análisis de prioridades.
Algunos en su sentido irónico dirían que los integrantes del GRA han visto muchas películas, series de televisión, fantasías que pertenecen a otra realidad, queriendo emular a los guardianes de la bahía, Ben Wash, los Rambos aéreos, el helicóptero salvador de la tormenta perfecta, etc. Que alienación.
Si se quiere contribuir con la seguridad ciudadana no delincuencial, por ejemplo, más importante que un helicóptero, seria que se potencie el sistema bomberil en toda la región. Los incendios son pan de cada día, dejan más victimas que los desparecidos en la montaña o en el mar; Los cuales tienen rescatistas terrestres o marítimos específicos.
Los incendios sumen a los afectados en el dolor de la perdida de sus seres queridos, los profundizan en la miseria al ver que sus escasos bienes son siniestrados por las llamas y sobre todo inermes, frente a la impotencia que sienten al ver que los bomberos no cuentan con los recursos para sofocar el siniestro rápidamente.
El cuerpo de bomberos es la parte de la sociedad civil mas abnegada, que no cobra un sol por su trabajo, que expone sus vidas al no contar con los mínimos elementos para su seguridad y para brindarla a los demás. A los bomberos sacrificados se les ha negado todo apoyo del GRA; Un alcalde ha salido en su auxilio donándoles 20,000 soles para tratar de contribuir en algo; ayuda insuficiente pero bien intencionada.
Surgen preguntas: ¿Cuánto se implementaría a los bomberos con 3.5 millones? ¿Cuantas vidas se salvarían? ¿Cuantas emergencias de todo tipo se solucionarían? ¿Estaría la sociedad civil mejor resguardada de las emergencias con un cuerpo de bomberos eficaz y eficiente, que con un helicóptero?
Lógicamente es cuestión de óptica, pero aunque solo sea una opinión, yo no despilfarraría de esta forma el dinero, no compraría una maquina volante, de repente lo gestionaría en calidad de donación para implementar este servicio. En fin dejaré esta inquietud a los sabios que hoy tienen el poder de decisión.
Despilfarro es un término que se usa para identificar el gasto suntuoso o al uso de mucho dinero en una compra que no soluciona los problemas de forma prioritaria. En este contexto decir que se mejorará la seguridad ciudadana comprando un helicóptero es una afirmación del despilfarro.
Podrá decirse que un helicóptero para 12 personas servirá para rescatar a individuos atrapados en el mar, en el territorio agreste de la sierra ancashina que incluye lugares lejanos, ser usado para el rescate de uno que otro montanista perdido en la cordillera blanca, etc. Pero me pregunto, si con esta acción ¿Se contribuirá prioritariamente para resguardar la seguridad ciudadana en el ámbito no delincuencial? Creo que no.
Un helicóptero necesita un mantenimiento sumamente costoso, personal idóneo, rescatistas entrenados, helipuertos descentralizados en el territorio ancashino que no hay, o es que dicho aparato volador aterrizara en las pistas, plaza de armas, techos policiales u otro lugar inapropiado; que locura.
Si bien es cierto alguien de la sociedad civil lanzó esta iniciativa con la mejor de las intenciones, en su afán de contribuir con una opinión respetable por cierto, para contribuir con un avance en seguridad ciudadana, no es razón para que el GRA tome a ojos ciegos esta propuesta sin un detenido análisis de prioridades.
Algunos en su sentido irónico dirían que los integrantes del GRA han visto muchas películas, series de televisión, fantasías que pertenecen a otra realidad, queriendo emular a los guardianes de la bahía, Ben Wash, los Rambos aéreos, el helicóptero salvador de la tormenta perfecta, etc. Que alienación.
Si se quiere contribuir con la seguridad ciudadana no delincuencial, por ejemplo, más importante que un helicóptero, seria que se potencie el sistema bomberil en toda la región. Los incendios son pan de cada día, dejan más victimas que los desparecidos en la montaña o en el mar; Los cuales tienen rescatistas terrestres o marítimos específicos.
Los incendios sumen a los afectados en el dolor de la perdida de sus seres queridos, los profundizan en la miseria al ver que sus escasos bienes son siniestrados por las llamas y sobre todo inermes, frente a la impotencia que sienten al ver que los bomberos no cuentan con los recursos para sofocar el siniestro rápidamente.
El cuerpo de bomberos es la parte de la sociedad civil mas abnegada, que no cobra un sol por su trabajo, que expone sus vidas al no contar con los mínimos elementos para su seguridad y para brindarla a los demás. A los bomberos sacrificados se les ha negado todo apoyo del GRA; Un alcalde ha salido en su auxilio donándoles 20,000 soles para tratar de contribuir en algo; ayuda insuficiente pero bien intencionada.
Surgen preguntas: ¿Cuánto se implementaría a los bomberos con 3.5 millones? ¿Cuantas vidas se salvarían? ¿Cuantas emergencias de todo tipo se solucionarían? ¿Estaría la sociedad civil mejor resguardada de las emergencias con un cuerpo de bomberos eficaz y eficiente, que con un helicóptero?
Lógicamente es cuestión de óptica, pero aunque solo sea una opinión, yo no despilfarraría de esta forma el dinero, no compraría una maquina volante, de repente lo gestionaría en calidad de donación para implementar este servicio. En fin dejaré esta inquietud a los sabios que hoy tienen el poder de decisión.
Dr. Jorge Ramal N.