A escasos cuatro años para las próximas elecciones presidenciales, seremos testigos y actores de esta contienda electoral teniendo como protagonistas a los candidatos de los distintos partidos nacionales que irán emergiendo como piezas de ajedrez dentro del tablero político; unos con la fortaleza de un rey y otros con la vulnerabilidad de un peón; todos ellos representando indistintamente a las corrientes ideológicas vigentes desde marxistas, social demócratas, social cristianos, liberales además de populistas y algunos movimientos regionales que querrán transformarse en partidos nacionales. Esta sería probablemente la distribución de las piezas en el tablero político de dicha contienda electoral. Este ensayo de los acomodos y reacomodos políticos se sostiene sobre la base de tres pies forzados; uno normativo y los otros dos experimentales.
El primero: Por la Ley de Partidos, que condiciona su vigencia en el Jurado Nacional de Elecciones siendo requisito haber obtenido un porcentaje mínimo de 4 % de los sufragantes a nivel nacional o de lo contrario haber obtenido representación parlamentaria; y para los otros dos casos experimentales se recogió información de las elecciones presidenciales del 2006, en que la mayoría de los partidos perdieron su inscripción electoral al no cumplir con los requisitos de la Ley de Partidos. También se tendrá en cuenta la fortaleza de algunos candidatos que han tenido y tienen experiencia gubernamental y otros por el apoyo popular que mantienen en ciertas regiones del Perú. Estos pies forzados nos permitirán avizorar como va ha ser el acomodo de los partidos menores antes de la primera vuelta y el reacomodo que se producirá en la segunda vuelta en torno a los dos partidos que quedarán en competencia.
Si manejamos las coordenadas de izquierda a derecha, tendríamos al Partido Nacionalista liderado por Ollanta Humala con grandes posibilidades de acceder a la segunda vuelta si logra unificar a los partidos de su misma ideología, no le siembren candidatos de izquierda y que la pobreza del País no descienda al 30%. Los Perú-posibilistas liderados por Alejandro Toledo, sus posibilidades de pasar a la segunda vuelta depende de la alianza que haga con el grupo de partidos que se encuentran unidos en el Parlamento, como Somos Perú, Acción Popular, Restauración Nacional y otros.
Es importante que su mensaje social de redistribuir la riqueza esté orientado al electorado de centro izquierda y recordándole al electorado de centro-derecha que como gobernante fue el promotor del boom económico que hoy vive el País. Es importante cuidar su imagen ante la opinión pública que lo considera una persona mundana.
Para revertir dicha imagen debe rodearse de un equipo de tecnócratas de intachable conducta moral. El Partido Aprista en su deseo de gobernar el Perú por quince años y del propio presidente Alan García por volver al poder en el 2016, manejarán dos alternativas de acuerdo a los intereses partidarios.
La primera liderada por Jorge Del Castillo. Si el gobierno aprista fracasara en dos de sus frentes políticos mas importantes como el de no lograr reducir la pobreza al 30% y la de no combatir los actuales escándalos de corrupción que hoy afectan la gobernabilidad del País, se presentaría la segunda alternativa de interés común con el actual alcalde de lima Luis Castañeda Lossio aportando con su caudal electoral en la capital y el APRA con su estructura partidaria.
El Partido Popular Cristiano, estaría liderado por la doctora Lourdes Flores Nano. Sus posibilidades son mínimas de llegar a la segunda vuelta ya que el espacio político en el que ella se ubica prácticamente estaría poblado por alfiles quienes la jaquearan constantemente como la candidata fujimorista Keiko Sofía y el actual presidente del callao Alex Kouri.
La otra opción para que Unidad Nacional se mantenga como alianza política sería que los líderes de ambos partidos, el Partido Popular Cristiano y Solidaridad nacional realicen un enroque político de tal manera que Castañeda Lossio sea el candidato presidencial de dicha agrupación y que Lourdes Flores acceda a la candidatura de la alcaldía de Lima metropolitana.
De hacer una buena gestión le serviría de trampolín en el mediano plazo para ocupar el sillón presidencial. De esta manera se convertiría en la primera mujer en la historia del Perú en ocupar indistintamente dichos cargos en forma democrática.
Este será el momento en el que se producirán los reacomodos de los partidos derrotados en la primera vuelta siendo los tres potenciales candidatos a pasar a segunda vuelta Ollanta Humala por el Partido Nacionalista, Alejandro Toledo por Perú Posible y Castañeda Lossio por el APRA o Unidad Nacional. Si este fuera el nuevo tablero político y los contendores Ollanta Humala y cualquiera de los otros dos, el peso electoral de los demás partidos inclinaría la balanza a favor de estos últimos incluido el APRA que buscará darle continuidad a la gobernabilidad.
El primero: Por la Ley de Partidos, que condiciona su vigencia en el Jurado Nacional de Elecciones siendo requisito haber obtenido un porcentaje mínimo de 4 % de los sufragantes a nivel nacional o de lo contrario haber obtenido representación parlamentaria; y para los otros dos casos experimentales se recogió información de las elecciones presidenciales del 2006, en que la mayoría de los partidos perdieron su inscripción electoral al no cumplir con los requisitos de la Ley de Partidos. También se tendrá en cuenta la fortaleza de algunos candidatos que han tenido y tienen experiencia gubernamental y otros por el apoyo popular que mantienen en ciertas regiones del Perú. Estos pies forzados nos permitirán avizorar como va ha ser el acomodo de los partidos menores antes de la primera vuelta y el reacomodo que se producirá en la segunda vuelta en torno a los dos partidos que quedarán en competencia.
Si manejamos las coordenadas de izquierda a derecha, tendríamos al Partido Nacionalista liderado por Ollanta Humala con grandes posibilidades de acceder a la segunda vuelta si logra unificar a los partidos de su misma ideología, no le siembren candidatos de izquierda y que la pobreza del País no descienda al 30%. Los Perú-posibilistas liderados por Alejandro Toledo, sus posibilidades de pasar a la segunda vuelta depende de la alianza que haga con el grupo de partidos que se encuentran unidos en el Parlamento, como Somos Perú, Acción Popular, Restauración Nacional y otros.
Es importante que su mensaje social de redistribuir la riqueza esté orientado al electorado de centro izquierda y recordándole al electorado de centro-derecha que como gobernante fue el promotor del boom económico que hoy vive el País. Es importante cuidar su imagen ante la opinión pública que lo considera una persona mundana.
Para revertir dicha imagen debe rodearse de un equipo de tecnócratas de intachable conducta moral. El Partido Aprista en su deseo de gobernar el Perú por quince años y del propio presidente Alan García por volver al poder en el 2016, manejarán dos alternativas de acuerdo a los intereses partidarios.
La primera liderada por Jorge Del Castillo. Si el gobierno aprista fracasara en dos de sus frentes políticos mas importantes como el de no lograr reducir la pobreza al 30% y la de no combatir los actuales escándalos de corrupción que hoy afectan la gobernabilidad del País, se presentaría la segunda alternativa de interés común con el actual alcalde de lima Luis Castañeda Lossio aportando con su caudal electoral en la capital y el APRA con su estructura partidaria.
El Partido Popular Cristiano, estaría liderado por la doctora Lourdes Flores Nano. Sus posibilidades son mínimas de llegar a la segunda vuelta ya que el espacio político en el que ella se ubica prácticamente estaría poblado por alfiles quienes la jaquearan constantemente como la candidata fujimorista Keiko Sofía y el actual presidente del callao Alex Kouri.
La otra opción para que Unidad Nacional se mantenga como alianza política sería que los líderes de ambos partidos, el Partido Popular Cristiano y Solidaridad nacional realicen un enroque político de tal manera que Castañeda Lossio sea el candidato presidencial de dicha agrupación y que Lourdes Flores acceda a la candidatura de la alcaldía de Lima metropolitana.
De hacer una buena gestión le serviría de trampolín en el mediano plazo para ocupar el sillón presidencial. De esta manera se convertiría en la primera mujer en la historia del Perú en ocupar indistintamente dichos cargos en forma democrática.
Este será el momento en el que se producirán los reacomodos de los partidos derrotados en la primera vuelta siendo los tres potenciales candidatos a pasar a segunda vuelta Ollanta Humala por el Partido Nacionalista, Alejandro Toledo por Perú Posible y Castañeda Lossio por el APRA o Unidad Nacional. Si este fuera el nuevo tablero político y los contendores Ollanta Humala y cualquiera de los otros dos, el peso electoral de los demás partidos inclinaría la balanza a favor de estos últimos incluido el APRA que buscará darle continuidad a la gobernabilidad.
En lo político Alan García buscará la impunidad por violación de DD HH en su primer gobierno y de probable corrupción en el segundo gobierno para poder retornar a la candidatura presidencial 2016. Y; si los finalistas fueran Castañeda Lossio y Alejandro Toledo, el electorado de los partidos políticos se dividiría de la siguiente manera: El Partido Nacionalista apoyando la candidatura de Alejandro Toledo y el resto de partidos apoyarán la candidatura de Castañeda Lossio haciendo de esta puja electoral un final de fotografía donde los movimientos regionales asumirán un papel protagónico.
Este caso ya se dio en las elecciones pasadas cuando Alan García le ganó en primera vuelta a la candidata de Unidad Nacional con los votos del movimiento regional Chim Pum Callao. Como antecedente histórico, es importante tener en cuenta que en los últimos 50 años de vida política los alcaldes de la capital del Perú como los partidos ubicados en los extremos del espectro político y los que han ido en alianza con otros nombres y otros símbolos no han llegado a gobernar y mas bien los ex –presidentes democráticos después de un período presidencial han vuelto a ser elegidos.
Carlos Alberto Moretti Villegas
