viernes, 17 de agosto de 2007

Campaña Permanente y Gobernabilidad

Un gobierno nacional, regional o local que no sabe comunicar es por que ha considerado que la campaña electoral positiva que lo llevó a la gobernanza terminó. Cuando en realidad debe saber que la campaña nunca termina, ésta se transforma de temporal y coyuntural a permanente.

El objetivo de la campaña permanente es que la representatividad que se obtuvo en las ánforas, no decaiga, se mantenga o más bien aumente.

La población que dio su voto; por defecto de la democracia es poco participativa y está coactada en su decisión hasta que termine un mandato; Pero esto no impide a que reclame información y la contraste con su forma de vida.

La población reclama al gobierno elegido por distintos canales, con diferentes intensidades, usando el déficit informativo como detonante de sus demandas. Demandas aprovechadas por muchos seudo líderes, generalmente opositores políticos que se traducen en visos de ingobernabilidad.

La comunicación desde el gobierno para que sea efectiva y tenga credibilidad debe tener coherencia en el tiempo; La línea política que se imprime debe ser uniforme, compartida y defendida por todos sus efectores ejecutivos.

La comunicación debe ser explicativa, didáctica, iterativa o redundante, previsora, extensa, participativa, a veces focalizada, persuasiva, en un constante proceso de retroalimentación o de Feed Back.

La promesa de la campaña electoral debe traducirse en la campaña gubernamental permanentemente, es decir el mensaje debe coordinarse teniendo en cuenta la heterogeneidad de la población en sus matices territoriales, culturales, étnicos, sociales, educacionales, religiosos, idiosincrásicos, y hasta políticos.

En una sociedad heterogenia con democracia precaria, los cambios estructurales tienen que ser paulatinos y no bruscos, sopena de ingobernabilidad y de crear una imagen de caos.

La política económica es talvez el tema más sensible, y remarca las diferencias ideológicas en el contexto nacional, latinoamericano y global. Es función de la comunicación gubernamental persuadir en pro de la gobernabilidad.

Un gobierno tiene que plantearse el reto de como quiere ser identificado al término de su gestión, y es ahí, donde surge el conflicto gubernamental, por lo que se debe trazar una agenda articulada, midiendo los tiempos de comunicación política para sentar las bases del próximo mandato con gobernabilidad y estabilidad.

Los voceros políticos del gobierno central actualmente se han circunscrito al centralismo limeño y esto se debe fundamentalmente a que existe una gran desconexión entre el poder ejecutivo central, la administración pública y su partido en todo el territorio nacional. Estos elementos casi ausentes en la provincia deben ser los efectores de la línea política gubernamental y también los potenciadotes y moduladores de la comunicación política. (Burocracia de confianza y el actor Político dentro de la sociedad civil).

Esta visión pretende expresar que la Comunicación y el Marketing Político permanentes desde el gobierno es necesario para influir en la gobernabilidad de un país.

Comunicación adecuada, incluyente, persuasiva, que viabilice la aceptación de la idea o plan es la piedra angular de cualquier gobernanza.

Para ello es necesario que se conozca extensivamente al llamado público objetivo, los medios de comunicación, los elementos de marketing, y debe contarse con los denominados comités de crisis que son medios de apoyo de cualquier gestión.

La comunicación debe ser reactiva, pero abierta (El gobierno debe colocar la agenda, debe imprimir su línea política favorecida en las elecciones y debe conjugarse con el termómetro social); Debe ser proactiva y coherente en el espacio y tiempo (El gobierno debe adelantar la agenda o crear el clima favorable para que esta se desarrolle). Debe lograr realidad en la comunicación contable con una preparación previa del terreno para la asimilación de datos que estén acordes con las metas de corto, mediano y largo plazo. (Enumeración de logros)

La comunicación debe contar con una primera fase muy importante: El escuchar a la población. La sociedad en su conjunto es el termómetro de la gestión. Cuando se está en contraposición debe buscarse el diálogo concertador, difusor de las soluciones halladas en éste espacio y conjuntamente trazar estrategias para lograr las metas.

La comunicación para que sea efectiva tiene que monitorizarse constantemente y tener presente que llegar a un gobierno significa estar en una campaña política constante.

Los programas matrices de un gobierno nunca deben de ser soslayados de la comunicación constante, por lo que cada uno de ellos debe tener un vocero valido, informado y eficiente. Estos no necesariamente son los presidentes, ministros, o alcaldes sino una persona entrenada para tal fin.

Dr. Jorge Ramal N.